Hola, somos Juan Marenco y Natalia Alfonso y te presentamos Be Curious, un newsletter de Be Influencers. Acá vas a encontrar una recopilación de cosas que nos interesan, nos llaman la atención y, sobre todo, nos hacen pensar.
Top 3 de la semana
TikTok y la política: Hablamos el año pasado acá sobre la relación directa que empezaba a haber entre TikTok y la política y también de lo mala que fue la aproximación de la dirigencia argentina a la plataforma. Hoy traemos este tema para ver cómo en Estados Unidos está creciendo cada vez más el uso de la app para apoyar candidatos y políticas públicas, algo que seguramente veremos en las distintas elecciones en Latinoamérica en los próximos años. Sólo les pedimos un favor, háganlo bien.
¿Baja el hype por los NFT? Este tweet nos hizo pensar qué está pasando con los NFT y si estamos frente a baja de ese primer hype que puede ser circunstancial o real. Lo cierto es que empieza a haber mucha literatura respecto a los inconvenientes con los NFT, los scams y su viabilidad. Vamos a estudiar y volveremos con más profundidad.
Facebook es mala y aburrida mientras que TikTok es divertida y adictiva. No maten al mensajero! No lo decimos nosotros, lo dicen los europeos entre 13 y 39 años que fueron consultados en esta encuesta. ¿Es para cantar victoria? Claro que no, Facebook también fue divertida y cool en algún momento. Como dice el lema, lo difícil no es llegar, es mantenerse.
Cultura de la Influencia
Discord y la internet conversacional
La semana pasada hablábamos de cómo estaban creciendo las comunidades y los fandoms a partir de Discord y Reddit y hoy queremos profundizar sobre esta temática, ¿por qué es relevante la conversación como tema? ¿qué posibilidades genera y por qué nunca pudo ser capitalizado del todo por plataformas y marcas?
Las conversaciones tienen un lugar privilegiado en la historia de internet ya que fueron el primer motor y la razón por la cual muchas personas empezaron a conectarse. Allá por los años 90 la BBS era el lugar donde nos encontrábamos a chatear de temas que nos interesaban en la búsqueda de encontrar alguien en algún lugar que tenga los mismos gustos. Un poco después, y en esa misma línea, el ICQ se posicionaba con el lugar de encuentro digital para todos quienes se conectaban a internet, ¡hasta íbamos a cyber cafés a chatear! La búsqueda de conversar, encontrar otros empáticos con quiénes compartir un rato o un diálogo eran en ese entonces el motor suficiente para pasar horas sentado frente a una computadora. Ese mismo comportamiento evolucionó en foros de discusión e intercambio como Psicofxp y Taringa que, durante muchos años, tuvieron más tráfico que cualquier otro sitio argentino al posibilitar el encuentro el de cientos de nichos que encontraban en foros y chats un lugar de pertenencia tal como lo fueron durante años las esquinas, las plazas o los fanzines o las galerías urbanas.
Sin embargo, esos grandes espacios tuvieron ciclos de vida muy cortos, una campana de gauss vertiginosa donde el hype inicial terminaba, quizás, demasiado rápido. Una de las hipótesis, quizás, no tenga que ver con la velocidad intrínseca de la cutlura pop que necesita permanente de nuevos espacios para no sentirse nunca viejo, sino con la imposibilidad de esas plataformas y espacios para poder monetizar esa enorme capacidad de captación de personas. Quizás el contrajemplo sea Reddit que logró sobrevivir varias modas, pero la gran mayoría de los emprendimientos que fomentaron la cultura del encuentro y la conversación terminaron cerrando. En una internet dominada por el modelo ad based, es decir, donde la publicidad busca ser el principal ingreso para todas las plataformas digitales, una posible hipótesis es que son espacios no muy atractivos para las marcas.
Los foros y chats son lugares poco controlables donde la libertad de los usuarios es casi total, no existe la necesidad de la identidad real, nadie publica fotos personales y el foco está exclusivamente en el contenido. La posibilidad de expresarse sin presión social, sin ser juzgados por otros, encontrar vínculos que unan, estar atrás de la seguridad de un teclado anónimo, son algunas de las razones que potencian estas expresiones. En esos ámbitos de libertad anónima es donde las marcas más se exponen a ser criticadas y juzgadas y, cómo sabemos, no es algo a lo que suelan aspirar Aunque, como vamos a ver, quizás esa tendencia esté cambiando.
Pero ese anónimato y falta de control también trae otros problemas, la aparición de grupos extremistas, pornografía, piratería y compra-venta de drogas es algo habitual en los foros y amplía a un más la distancia con posibles anunciantes.
Tal es la aversión por la expresión sin filtros que las redes sociales, quienes nacieron prometiendo el libre intercambio entre usuarios, fueron relegando todo tipo de potencial en ese sentido y se enfocaron más en la expresión de pocos usuarios con potencial de creadores e influencers haciendo muy poco amigable el diálogo público entre usuarios y hasta comenzaron a erigirse como editores censurando y banneando contenido que no respetara ciertos parámetros.
En ese contexto de falta de espacios de interacción y la propia necesidad de conversación hicieron que hoy Discord sea el lugar elegido por miles de personas para reeditar el tradicional hábito de la conversación.
Surgido desde el gaming y con un hilo directo con Twitch y sus comunidades, Discord tuvo un crecimiento vertiginoso durante los últimos dos años liderado especialmente por lo que no fueron sus orígenes si no llegando a cada vez más personas y actualmente con más de 1 millón de servidores públicos entre los que se encuentran temas tan diversos como la publicidad, Cypto, matemática, salud mental o Marvel.
Como todo hype Discord encontró una comunidad fiel y que se apropió de la plataforma com propia, la milita y la defiende en otras redes sociales, pero también está haciendo mucho para intentar sobrepasar el hype y permanecer. Aprendiendo de experiencias pasadas, agrupa los servidores no apto para menores bajo el tag NSFW y hasta creó una academia de moderadores para sostener el buen clima y extender sus potencialidades. También asumió críticas y tuvo que, por ejemplo, suspender su integración con NFTs y Crypto cuando su propia comunidad amenazó con irse.
Quizás empujadas por un contexto social más permeable a la crítica y con con la necesidad de encontrar ámbitos de diferenciación, las marcas esta vez están viendo a la internet conversacional con más cariño que hasta hace unos pocos años. La proliferación de fandoms y de comunidades especializadas que agregan valor a marcas o, productos y servicios empiezan a ser una necesidad concreta. Hoy las comunidades en Discord son lugares de aprendizaje e intercambio que las marcas que se animan a correrse de un lugar 100% seguro salen enriquecidas y muchas veces con mejores ofertas de las planteadas inicialmente.
La internet conversacional no es una moda ni una tendencia, sino el motor propio de la red que hasta ahora pudo ser capitalizada por diálogos semi privados (Whatsapp, Telegram), pero que de a poco parece recuperar ese primer impulso de hace 20 años aunque mejorado y con más posibilidades. Estamos atentos.
Be Influencers recomienda
Por lo general en esta sección solemos recomendar creadores de contenidos de redes como TikTok, Instagram o Youtube, gente que probablemente ustedes no conozcan y con formatos innovadores o que llaman la atención.
Hoy no, hoy queríamos hablarles de alguien que posiblemente conozcan, pero no quizás en todas sus dimensiones y nos interesa particularmente una de sus columnas en el diario.
- ¿Es joda chicos? ¿Vienen a hablar de influencia y me vienen con lo más tradicional del mundo?
- Si
- ¿Por qué?
- Porque podemos
Tamara Tenenbaum es filósofa, escritora y periodista, autora de varios libros, Tamara también hace muchos años desarrolló una carrera periodística en varios lugares, pero desde el lanzamiento de ElDiario.ar escribe una columna semanal sobre distintos temas que le interesan, en general son temáticas que a nosotros también nos atraen y que nos hacen pensar. En su última publicación escribió sobre Inventing Anna, una serie de Netflix que cuenta la historia de una chica que fingió ser una heredera europea para cautivar y entrar en el círculo íntimo de Manhattan. Como dice Tamara la serie es olvidable, pero deja algunas reflexiones y una de las que ella tuvo y nos convocó a escribir esto es que “hoy es posible mostrarlo todo y esconderlo todo, al mismo tiempo y en el mismo acto”.
Es interesante ver como en la era digital y de la exposición en las redes sociales donde supuestamente mostramos todo podemos al mismo tiempo esconderlo todo, ¿por qué? Porque la construcción de nuestra identidad digital está, si queremos, bajo nuestro control y ese todo que mostramos es el recorte que elegimos para quienes nos siguen o tienen acceso crean que somos de esa manera. La identidad digital no tiene por qué ser la misma que la física y eso lo vemos en casos como los de Anna o el propio estafador de Tinder.
Gracias por leernos, ¡hasta la semana que viene!