Hola, somos Juan Marenco y Natalia Alfonso y te presentamos Be Curious, un newsletter de Be Influencers. Acá vas a encontrar una recopilación de cosas que nos interesan, nos llaman la atención y, sobre todo, nos hacen pensar.
Top 3 de la semana
Chau Onlyfans, hola Onlyfans: Una semana después de haber anunciado que iba a prohibir todo contenidos para adultos, la plataforma decidió volver atrás. ¿Qué pasó originalmente? Los bancos y la presión financiera hicieron que los directivos optaran por querer cambiar el foco. Pero la presión de los creadores y la posibilidades de quedarse sin usuarios los hicieron recapacitar.
Despidan al swipe up que se va: En su proceso por cambios que mejoren la experiencia con el usuario, Instagram planea reemplazar al swipe up, ese gesto que hacíamos en las stories de los influencers para comprar cosas, por un más sencillo sticker. Además promete abrir esa posibilidad a todos los usuarios quitando la limitación actual de que solo la tengan los que tienen más de 10.000 seguidores. ¿Mejorarán las métricas de conversión?
TikTok y Spotify un sólo corazón: Si hay una relación que parece irrompible es la de TikTok con Spotify. Como bien explicó Bizarrap en su entrevista en La Resistencia, un tema musical tiene chances de subir sus reproducciones en Spotify cuando es parte de challenges de TikTok. Pero no solo eso, también vemos como las discográficas hoy salen a buscar talentos en la plataforma como ya contamos en el newsletter pasado con el caso de Bella Poarch. Además, ahora aparecieron usuarios que promocionan playlist y que se transformaron en los principales recomendadores. Por supuesto que ya están las discográficas pidiendo sumarse, ¿romperá con el contenido genuino?
Cultura de la Influencia
Esta semana se desarrolló un estudio en en Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Alemania, Francia y Australia por Savanta y Bazaarvoice, que concluyó que el 56% de los 9.000 consumidores consultados prefiere seguir a personas normales en las redes sociales, mientras que el 34% se elije a los famosos, el 29% por expertos en determinadas materias y el 25% por estrellas de los social media.
Es decir, preferimos seguir a nuestros amigos, familiares o conocidos que a otro tipo de usuarios. ¿Por qué? Porque la cercanía y la empatía que tenemos con esos usuarios nos hace mejor la experiencia de consumo de contenidos. Esa empatía no se traduce necesariamente en conocer a las personas, pero sí en sentirlos más reales.
Por otro lado, ese mismo estudio plantea que, a la hora de buscar contenido genuino, son los expertos en temas específicos (39%) y la gente normal y corriente (38%) son las fuentes en las que más confían los consumidores por delante tanto de las celebridades (14%).
Cuando analizamos la Cultura de la Influencia, ponemos a los estos actores bajo el paraguas de influencers: expertos, celebridades, estrellas de social media y hasta la “gente común”. Entendemos que la fragmentación del consumo genera intermediarios que influencian al resto con sus mensajes y que esa influencia se incrementa con la cercanía y la validación social. Un desafío grande para los usuarios con muchos seguidores será sostener ese poder a fuerza de autenticidad y honestidad.
Be Influencers recomienda
¿Conocías a Sabina Sinr? ¿No? Bueno, conocela acá. Sabina es una joven de 22 años conocida particularmente por su cuenta en TikTok, donde tiene casi 14 millones de seguidores, aunque también la podemos encontrar en Instagram, Youtube y Twitch. Su contenido principal tiene una premisa simple: reaccionar a cosas. Reacciona a otros TikToks, videos que circulan por internet, a perfiles de Tinder, entre otros muchos contenidos. Este tipo de contenido no es algo nuevo, pero hay algo que diferencia las reacciones de Sabina de todo el resto. Algo muy sencillo también, que es su risa tan contagiosa. Puede parecer exagerado, pero es parte fundamental de sus videos, sin esa risa tan característica, quizás Sabina no destacaría de otros contenidos similares y este es el punto que nos interesa analizar hoy.
Como decimos siempre en Be Influencers, los creadores de contenido, para ser tales, tienen que tener un concepto detrás, y no necesariamente tiene que ser un concepto complejo y súper abstracto. Es más, cuanto más simple, mejor y ese concepto puede ser algo tan sencillo como una risa característica y contagiosa.
Hoy, los contenidos de video reacciones abundan en internet y en todas las plataformas digitales pero ¿a qué se debe esto? Muchos habremos escuchado alguna vez a alguien decir algo como “¿por qué les parece divertido ver a alguien mirando algo, en lugar de verlo directamente?” Y la respuesta es bastante simple: porque el consumo de entretenimiento y contenidos es social y no personal. Cuando algo nos gusta, nos emociona o nos hace reír, queremos compartirlo con otras personas. Sino, levante la mano quién no comparte memes o videos graciosos con sus amigos. Incluso, hay memes al respecto, obvio.
La clave del éxito en TikTok está en saber mover su algoritmo, y una de las mejores formas de hacerlo es hacer contenido compartible. Cuanto más se comparta, más visualizaciones tendrá y más se mostrará en la sección Para Ti. Adrede o no, Sabina entendió muy bien esto y, probablemente, sea el secreto de que muchos de sus contenidos superen las 4 millones de visualizaciones. Eso, contenido compartible. ¿A quién no le gusta ver videos divertidos, con el valor agregado de verlo con una persona riéndose al mismo tiempo que uno y, además, con una risa tan contagiosa como la de Sabina?
Lo que la semana nos dejó
Esta semana nos dejó una picantísima entrevista a Coscu en el ciclo de Caja Negra, conducido por Julio Leiva. Allí tocaron tres temas principales: Twitch vs. la televisión, la unión que caracteriza a los creadores y artistas argentinos y cómo eso impacta en sus comunidades y la ya famosa cena con Messi a la que asistieron Coscu e Ibai.
Ninguno de estos temas tiene desperdicio, así que vamos a ir uno por uno detenidamente.
Hoy, Twitch vs. la televisión
“En los medios tradicionales siempre me sentí desplazado” le dice Coscu a Leiva, aunque es una frase con la que muchos creadores de contenido, no solo de Twitch sino de las plataformas digitales en general, podrían replicar como propia. También habló de la descalificación que existe en la tele y que “se busca solamente el título, sin importar a quien tengas que pisar en el camino”. Sí, como dijimos, se puso picante pero acá no vamos a matar a la televisión, sino entender el punto de vista de Coscu, el referente más importante del streaming en Argentina.
Es cierto que existe una cierta guerra entre medios tradicionales y medios digitales pero, en nuestra opinión, los ataques provienen mucho más de las personalidades de la tele hacia los creadores de contenido que al revés. Podemos recordar el cruce entre Gustavo Lopéz e Ibai, del cual hablamos en ediciones anteriores, o cuando Mariano Iúdica se indignó porque Momo, streamer, tuvo una entrevista con Dihzy, hijo de Alberto Fernandez y creador de contenido, y él, siendo periodista y muy conocido, no había tenido la oportunidad. También hay infinidades de ejemplos de personas de los medios tradicionales hablando de los creadores de contenido como “pibitos que solo suben videítos a internet y se hacen famosos de la noche a la mañana, sin tener el valor de la trayectoria”.
Esta temática se toca bastante en el podcast que se estrenó la semana pasada llamado Basta Chicos, conducido por el youtuber Damián Kuc, donde además de hacer un recorrido por la vida de Ricardo Fort, nos explican como él en realidad fue el primer youtuber argentino no reconocido, cómo en realidad nunca terminó de encajar en la televisión y las razones por las cuales “El Comandante” sigue más vivo que nunca en el mundo de internet como meme, la figura más alta de la cultura digital, gracias a la comunidad de Taringa y luego traspolado a redes sociales. Si no tuvieron la oportunidad de escucharlo, se lo recomendamos.
Dicho esto, estamos seguros de que esta especie de enfrentamiento entre medios tradicionales y digitales proviene del no entender cómo funcionan las plataformas digitales, cómo es el trabajo de los creadores de contenido y por qué actualmente tienen tanto éxito. Por esa razón, vamos a enfocarnos acá en entender, de manera muy sintética, cómo funciona el universo Twitch.
Twitch es una plataforma perteneciente a Amazon que permite realizar transmisiones en vivo. Dicho de otra manera, y según la propia plataforma, Twitch es el lugar donde millones de personas se juntan a diario en directo para chatear, interactuar y crear su propio entretenimiento. En su web institucional, Twitch también les dice a los creadores que es el hábitat de tu contenido más creativo. Tráete tus pasiones y nosotros te ayudaremos a crear una comunidad en torno a ellas. De esto, entonces, podemos destacar los tres puntos principales que mejor definen a la plataforma:
Crear tu propio entretenimiento: cualquier persona que quiera pueda abrirse un canal en Twitch, no hay requerimientos, excepto no violar las normas comunitarias como mostrar violencia, drogas, armas y otras cuestiones lógicas. Volviendo a la entrevista con Coscu, este es uno de los mayores diferenciales con la televisión. En Twitch, y el resto de las plataformas digitales en general, no hay jerarquías, no hay castings, no hay estudios enormes. Algunos streamers cuentan con un setting, pero la mayoría stremean con su cama, el armario o la cómoda que heredaron de una abuela de fondo. Es otra estética que en las comunidades digitales no hace ruido, ya que el foco no está puesto en el status o la trayectoria de la que tanto se habla en la tele, sino en el contenido.
Crear una comunidad en torno a las pasiones: Twitch es la plataforma que mayor sentido de comunidad genera y, en lo que respecta a medios digitales, las comunidades lo son todo. Existen diferentes maneras para la comunidad de brindar apoyo a los creadores de contenido. 1) Siendo un seguidor, lo cual es gratuito y brinda los assets básicos de la plataforma. 2) Siendo un suscriptor, habiendo 3 niveles con valores de 5 a 25 dólares. Los suscriptores tienen beneficios especiales como streams exclusivos o emojis personalizados para el chat. 3) Donando el famoso cafecito, por el valor que cada persona quiera. Suele hacerse por fuera de Twitch, normalmente a través de Paypal. En conclusión, en Twitch el sentido de comunidad es muy fuerte y hay un valor en el apoyo monetario hacia los creadores de contenido de parte de los usuarios, cuestión que en otros medios no existe.
Foco en el chat: el chat es una parte clave de todos los streamings ya que brinda la posibilidad a creadores y audiencias de comunicarse en real time. A diferencia de la televisión, e inclusive otras plataformas digitales, la comunicación no es unidireccional, las audiencias no son pasivas sino que, al contrario, se transforman en parte del espectáculo.
Suele decirse que Twitch es la nueva televisión porque la forma de consumo es, en cierta manera, similar. Como nos sentamos en el sillón a ver 1, 2 o 3 horas de tele, también nos sentamos en el sillón (o silla gamer) a ver streamings que duran 1, 2, 3 o más horas. Tengamos en cuenta que el tiempo en pantalla promedio de Twitch es de 95 minutos, bastante más elevado que la de, por ejemplo, Instagram que es de 28 minutos. Sin embargo, es una experiencia muy distinta. Twitch tiene otro lenguaje y otro tono, mucho más relajado y genuino que el de la televisión. Los streamers suelen comer en sus transmisiones, pero no se imaginen la mesa de Mirtha, comen una milanesa con puré sin ningún tipo de glamour. Es casi como lo es para cualquiera de nosotros una reunión con amigos.
Hasta acá llegamos por hoy. La semana que viene vamos a seguir charlando acerca de comunidades, tanto por parte los usuarios como de los propios creadores y sobre cómo, y qué implica, que Coscu e Ibai hayan sido invitados por nada más ni nada menos que Leo Messi a una cena en su propia casa.
Gracias por leernos, ¡hasta la semana que viene!